DESPERTANDO
Llegó el Cisne Negro, y llegó con Poder, con corona sobre su cabeza. Mientras una parte del planeta está preocupada por la destrucción de la economía, la otra parte está atenta a la voz que nunca se imaginó poder escuchar, la voz que nos dice y nos pide que nos quedemos quietos y que observemos a nuestro alrededor.
Nos habla y nos pregunta: ¿Qué es lo realmente importante para el ser humano?, ¿Por qué tanto afán?, ¿Dónde quedó tu confianza y tu fe?, ¿Entiendes ahora qué es el amor al prójimo y el respeto a los demás?, ¿Entiendes lo que es poder amar, compartir y disfrutar de los tuyos?, ¿Vez la necesidad imperante de crear conciencia y ponerse a trabajar en ello de inmediato?.
¿Cuánto tiempo nos queda para no autodestruirnos? ¿Conoces que realmente Dios existe y es quién hace existir todas las cosas y te está hablando hoy?, ¿Entiendes ahora que esta conciencia sólo te la puede dar El?. Aunque el ser humano quiera lanzar un ataque para egoístamente obtener beneficios, no es él quién te está hablando internamente con esta llegada del Cisne Negro. No es el hombre o el líder de una nación quién te está haciendo ver como contaminas tu vida, tu casa, tu ciudad, tu nación, tu mundo y por lo tanto tu alma. No es él quien está moviendo tu piso para llevarte a reflexionar. No es él, es tu Creador.
También deberán entender todas las naciones lo que individualmente estamos aprendiendo, que al ayudar al otro te ayudas a ti mismo, que si no se ayudan entre naciones, sin ánimos de lucrarse, no lo estarán haciendo con sus propia nación. Todo es recíproco, las leyes no creadas por el hombre siempre se cumplen. ¿Quieres recibir? Entonces Da. Establézcase esta conciencia en todo el planeta.
El Creador nos habla y el hombre escucha. Escuchemos con atención y hagamos nuestra parte!
Apruébalo y distribúyelo.